FABLE 2 (XBOX 360)
Con este juego me ha pasado pasa una cosa en la que el pobre no ha tenido la culpa. Pongamos una comparación, por ejemplo... con las pelis de Batman de Nolan, que es lo primero que me viene a la mente (¿porqué será?). Bueno, al ver "Batman Begins" la peña dice: "Coño, que buena peli sobre Batman, es realmente buena". Luego, ven "TDK" y dicen: "Ostias, vaya pedazo de peliculón, me cago en los muertos, es aún mejor que la primera... es la puta peli del año. Y de lo mejor que he visto en muuucho tiempo". Ahora imaginad (salvando tonterías como cronología, continuaidad, etc.) que las ven en orden inverso. Verían "TDK" y dirían lo mismo que antes: "Ostias, vaya pedazo de tal y cual, etc.". Luego con la otra tendrían un regustillo extraño, no de estar ante un mal producto, ni mucho menos, pero.... "Ñe, es buena, sí, mucho, pero es que comparada con la otra...". Por último cambiad los términos de la ecuación de modo que "Fable 2" es "Batman Begins" y "Fallout 3" es "TDK". Pues eso mismo.
Terminada la aclaración de porqué no he podido evitar comparaciones, paso a comentar un poco lo que me ha parecido el juego una vez terminado, y a explicar los que para mí son los pros y los contras que presenta.
Empiezo por todo lo bueno que tiene, que es mucho. Fable 2 es un muy muy buen juego. Como dice todo el mundo, está más cerca de los que Peter Molyneux ya intentó con la primera parte y en la que quizá se quedó corto: una aventura en un mundo abierto, donde cada decisión afectaría al desarrollo de la historia, y donde se diera al jugador la máxima libertad posible, independientemente del hilo argumental principal. Por libertad entenderíamos tanto libertad de movimiento (tipo juego "sandbox", pero no tanto) como libertad a la hora de mejorar o especializar al personaje, además de decidir si vas a ser bueno, o vas a ser un hijo de puta del copón. Y digamos que sí, que cumple estas premisas. Uno puede elegir casi siempre cuando y en que orden hacer las misiones secundarias, además de todo lo que quieres hacer entre una y otra. En ese sentido mejora mucho respecto al primero, porque hay bastantes actividades a las que dedicarte aparte de avanzar en la historia, ya sea haciendo las susodichas "sidequests", trabajando para ganar dinero, ganándote el afecto (o el odio) de los habitantes de Albión a base de numeritos en público, ligando, casándote, teniendo hijos, mudándote a una casa mejor... Es verdad que muchas de estas cosas ya se podían hacer en "Fable", pero se ha ampliado bastante la oferta. También se ha añadido la posibilidad de comprar casi la totalidad de los inmuebles del juego, por lo que te puedes dedicar a comprar y alquilar casas, tiendas, talleres, etc. así como juguetear con los precios (bajándolos para ir de guai, subiéndolos para ir de titano). Además puedes amueblarlas a tu gusto, lo que te da un extra de entretenimiento.
Otro aspecto bueno respecto a su antecesor es que el mundo es bastante más grandecito (pro y contra, como veremos luego). Las ciudades y pueblos son más grandes, y los terrenos por donde perderte también. Para que no te pase esto último precisamente, han metido el concepto de la "senda dorada" (no confundir con la de Leto II), una línea luminosa que nos indicará por donde ir en los principales menesteres del juego. La inclusión del perro del personaje también es todo un acierto, pues además de dar la sensación de ir siempre acompañado, la criaturita te busca tesoros enterrados, cofres, y además te ayuda en el combate. El combate, por otro lado, sigue siendo igual de intuitivo y divertido que en el primer Fable, pudiendo optar por las armas blancas, armas de fuego, o la magia. También se conserva y amplía el sistema de "expresiones" para interactuar con los PNJ, con algunas de ellas realmente descojonantes.
Respecto a la gradual mejora del personaje, el sistema sigue siendo el mismo, muy sencillo y fácil de llevar, pudiendo mejorar habilidades de melee, de ataque a distancia o de poder mágico. Puedes optar por especializarte, pero al final del juego terminarás teniendo todo al máximo. La experiencia para las mejoras SOBRA, no como en el primero, donde solo había un sitio donde hartarte de matar bichos indefinidamente. Respecto al vestuario, peinados, tatuajes, etc., la oferta es bastante más amplia que en el primero, pudíendole dar a tu personaje el aspecto que desees. Teniendo en cuenta que las ropas no mejoran tu resistencia al daño, la cosa no queda pues como en tantos otros juegos en llevar "la armadura más gorda que haya disponible". Muy al contrario, el vestuario estará dirigido al carácter que queramos imprimirle al personaje y al como queremos que el resto de personas nos vean (ya sea por elegancia, presencia o pintas de "bueno o malo". Incluso travestismo). También se han incorporado muchas tonteriítas que no aportan mucho pero que le dan un aire muy completo al juego y que se agradecen, como lo de engordar si te hinchas a comer, lo de mantener relaciones sexuales (con o sin pagar, con o sin protección -sí, hay condones-, hetero u homo...), enseñarle trucos al perro, además de las búsquedas de llaves especiales, gárgolas que esconden tesoros, etc.
Por último, destacar las que para mí son las grandes bazas del juego: los gráficos, la ambientación y la banda sonora. Fable 2 es visualmente bellísimo, un puto cuento de hadas al que es muy agradable jugar. Los decorados están muy logrados, las suaves transiciones día-noche nos permitirán disfrutar de preciosas puestas de sol, etc. Además el mundo va cambiando a medida que transcurren las distintas etapas de la trama (y dependiendo de nuestras decisiones, inversiones, etc.), haciéndose algunas ciudades más grandes, cambiando la situación de detrminadas cosas, etc. lo que se agradece bastante. La ambientación (500 años despues de Fable) también es más original, por no ser ya la clásica ambientación medieval sino más tirando a renacentista y posterior (rollo piratas, casacas rojas, mosquetes y sus muertos, para entendernos). Eso ha rayado a mucha peña, que todavía anda por los foros preguntando donde pueden conseguir armaduras (inexistentes en el juego), pero a mí me ha encantado. Por último, mención especial a la banda sonora, que encaja perfectamente con la historia y con las situaciones que nos encontramos.
Ahora vamos con los contras. La mayoría de estos radican en que cuando se te describe el juego como "el Fable pero por diez" uno se imagina que va a ser como un Final Fantasy de tocho, con todas las cositas innovadoras que traía Fable. Y no es así. Para empezar ES MUY CORTO. Es cierto que puedes perder todo el tiempo del mundo haciendo el chorra, pero nunca deja de ser más o menos repetición de las mismas cosas (comprar más casas, casarte más veces, buscar más armas legendarias, etc...), y cuando te decides a avanzar en la trama, todo va demasiado rápido. Antes de que te des cuenta habrás llegado al final. Es cierto que una vez terminado puedes seguir jugando, pero aparte de un par de misiones, todo se vuelve a reducir de nuevo a hacer las mismas cosas. Es verdad también que puedes empezar de nuevo con la opción moral directamente opuesta (yo acabé como santo, con el aro en la chorla y todo), pero me cuesta mucho hacerme dos veces seguidas el mismo juego, aunque ahora me dedicara a ser un cabrón con todo dios.
Otra cosa ligeramente decepcionante es el tamaño del mundo. Albión ES MÍNIMO. Es cierto que antes he dicho que es más grande que en el primer juego y que eso supone un pro, pero no es TAN grande. No como uno querría. Yo esperaba algo inmenso, pero creo que son, como ya he dicho, esperanzas residuales despues de tantos y tantos Final Fantasy (u Oblivion) tan enooooormes y laaaaargos...
Por otro lado, la historia principal me parece un poco simplona y falta de personajes carismáticos. Nunca llegas a poder sumergirte en la historia totalmente, porque andas haciendo otras cosas y además no es demasiado clara ni atractiva. Por poner un ejemplo, el malo malísimo es un puto chufla (sobre todo comparado con el de Fable, "Jack of Blades", que terminaba en forma de dragonaco gigante) y en el clímax final, en el enfrentamiento definitivo, resolví todo pegándole un trabucazo en la jeta. Uno solo. ¿Realista? Puede ser (sobre todo viendo el trabuco legendario en cuestión). ¿Épico? Nada de nada. Y la búsqueda de objetos realmente poderosos (como las ya mentadas armas legendarias) se me antoja facilona. Para conseguir la "Daichi", sin duda la mejor arma del juego, no hay que liar nada, solo avanzar lo suficiente en la trama y buscar un poco. Quizá esto también me ha decepcionado en parte por los recuerdos de todo lo que había que hacer en los FF para conseguir los objetos realmente pollúos (pollúo=muy bueno, muy poderoso). Por último, una cosa que también le resta duración al juego es que el dinero y la experiencia (lo necesario para mejorar y avanzar, vamos) son muy muy fáciles y rápidas de conseguir, si sabes cómo (y sin trucos). Si no lo sabes, el juego te durará mucho más.
En definitiva, puede parecer que el juego me haya resultado decepcionante en su conjunto, si bien no es para nada así. De hecho, diría que es un juego sobresaliente, casi imprescindible para los amantes de los juegos "de rol" (pongo comillas porque lo de juegos de rol aplicado a videojuegos es bastante relativo, y lo será siempre), y muy muy satisfactorio de jugar. Está muy trabajado y se nota que le han puesto amor a la criatura a la hora de crearla. Y además es que, admitámoslo, es precioso. Puedes quedarte un rato embobado en la plaza de Bowerstone mirando las casas, la gente, los puentes y quedar realmente fascinado, lo cual es extensible a cualquier parte del mundo. En resumen, un gran producto del que hubiera estado mucho más enamorado si no me hubiera hecho un mes antes la reliada postapocalíptica de Bethesda.
Ahora a por nuevos horizontes, esta vez galácticos. Este fin de semana empiezo con Mass Effect, e intuyo que ese no se me va a quedar pequeño....
Terminada la aclaración de porqué no he podido evitar comparaciones, paso a comentar un poco lo que me ha parecido el juego una vez terminado, y a explicar los que para mí son los pros y los contras que presenta.
Empiezo por todo lo bueno que tiene, que es mucho. Fable 2 es un muy muy buen juego. Como dice todo el mundo, está más cerca de los que Peter Molyneux ya intentó con la primera parte y en la que quizá se quedó corto: una aventura en un mundo abierto, donde cada decisión afectaría al desarrollo de la historia, y donde se diera al jugador la máxima libertad posible, independientemente del hilo argumental principal. Por libertad entenderíamos tanto libertad de movimiento (tipo juego "sandbox", pero no tanto) como libertad a la hora de mejorar o especializar al personaje, además de decidir si vas a ser bueno, o vas a ser un hijo de puta del copón. Y digamos que sí, que cumple estas premisas. Uno puede elegir casi siempre cuando y en que orden hacer las misiones secundarias, además de todo lo que quieres hacer entre una y otra. En ese sentido mejora mucho respecto al primero, porque hay bastantes actividades a las que dedicarte aparte de avanzar en la historia, ya sea haciendo las susodichas "sidequests", trabajando para ganar dinero, ganándote el afecto (o el odio) de los habitantes de Albión a base de numeritos en público, ligando, casándote, teniendo hijos, mudándote a una casa mejor... Es verdad que muchas de estas cosas ya se podían hacer en "Fable", pero se ha ampliado bastante la oferta. También se ha añadido la posibilidad de comprar casi la totalidad de los inmuebles del juego, por lo que te puedes dedicar a comprar y alquilar casas, tiendas, talleres, etc. así como juguetear con los precios (bajándolos para ir de guai, subiéndolos para ir de titano). Además puedes amueblarlas a tu gusto, lo que te da un extra de entretenimiento.
Otro aspecto bueno respecto a su antecesor es que el mundo es bastante más grandecito (pro y contra, como veremos luego). Las ciudades y pueblos son más grandes, y los terrenos por donde perderte también. Para que no te pase esto último precisamente, han metido el concepto de la "senda dorada" (no confundir con la de Leto II), una línea luminosa que nos indicará por donde ir en los principales menesteres del juego. La inclusión del perro del personaje también es todo un acierto, pues además de dar la sensación de ir siempre acompañado, la criaturita te busca tesoros enterrados, cofres, y además te ayuda en el combate. El combate, por otro lado, sigue siendo igual de intuitivo y divertido que en el primer Fable, pudiendo optar por las armas blancas, armas de fuego, o la magia. También se conserva y amplía el sistema de "expresiones" para interactuar con los PNJ, con algunas de ellas realmente descojonantes.
Respecto a la gradual mejora del personaje, el sistema sigue siendo el mismo, muy sencillo y fácil de llevar, pudiendo mejorar habilidades de melee, de ataque a distancia o de poder mágico. Puedes optar por especializarte, pero al final del juego terminarás teniendo todo al máximo. La experiencia para las mejoras SOBRA, no como en el primero, donde solo había un sitio donde hartarte de matar bichos indefinidamente. Respecto al vestuario, peinados, tatuajes, etc., la oferta es bastante más amplia que en el primero, pudíendole dar a tu personaje el aspecto que desees. Teniendo en cuenta que las ropas no mejoran tu resistencia al daño, la cosa no queda pues como en tantos otros juegos en llevar "la armadura más gorda que haya disponible". Muy al contrario, el vestuario estará dirigido al carácter que queramos imprimirle al personaje y al como queremos que el resto de personas nos vean (ya sea por elegancia, presencia o pintas de "bueno o malo". Incluso travestismo). También se han incorporado muchas tonteriítas que no aportan mucho pero que le dan un aire muy completo al juego y que se agradecen, como lo de engordar si te hinchas a comer, lo de mantener relaciones sexuales (con o sin pagar, con o sin protección -sí, hay condones-, hetero u homo...), enseñarle trucos al perro, además de las búsquedas de llaves especiales, gárgolas que esconden tesoros, etc.
Por último, destacar las que para mí son las grandes bazas del juego: los gráficos, la ambientación y la banda sonora. Fable 2 es visualmente bellísimo, un puto cuento de hadas al que es muy agradable jugar. Los decorados están muy logrados, las suaves transiciones día-noche nos permitirán disfrutar de preciosas puestas de sol, etc. Además el mundo va cambiando a medida que transcurren las distintas etapas de la trama (y dependiendo de nuestras decisiones, inversiones, etc.), haciéndose algunas ciudades más grandes, cambiando la situación de detrminadas cosas, etc. lo que se agradece bastante. La ambientación (500 años despues de Fable) también es más original, por no ser ya la clásica ambientación medieval sino más tirando a renacentista y posterior (rollo piratas, casacas rojas, mosquetes y sus muertos, para entendernos). Eso ha rayado a mucha peña, que todavía anda por los foros preguntando donde pueden conseguir armaduras (inexistentes en el juego), pero a mí me ha encantado. Por último, mención especial a la banda sonora, que encaja perfectamente con la historia y con las situaciones que nos encontramos.
Ahora vamos con los contras. La mayoría de estos radican en que cuando se te describe el juego como "el Fable pero por diez" uno se imagina que va a ser como un Final Fantasy de tocho, con todas las cositas innovadoras que traía Fable. Y no es así. Para empezar ES MUY CORTO. Es cierto que puedes perder todo el tiempo del mundo haciendo el chorra, pero nunca deja de ser más o menos repetición de las mismas cosas (comprar más casas, casarte más veces, buscar más armas legendarias, etc...), y cuando te decides a avanzar en la trama, todo va demasiado rápido. Antes de que te des cuenta habrás llegado al final. Es cierto que una vez terminado puedes seguir jugando, pero aparte de un par de misiones, todo se vuelve a reducir de nuevo a hacer las mismas cosas. Es verdad también que puedes empezar de nuevo con la opción moral directamente opuesta (yo acabé como santo, con el aro en la chorla y todo), pero me cuesta mucho hacerme dos veces seguidas el mismo juego, aunque ahora me dedicara a ser un cabrón con todo dios.
Otra cosa ligeramente decepcionante es el tamaño del mundo. Albión ES MÍNIMO. Es cierto que antes he dicho que es más grande que en el primer juego y que eso supone un pro, pero no es TAN grande. No como uno querría. Yo esperaba algo inmenso, pero creo que son, como ya he dicho, esperanzas residuales despues de tantos y tantos Final Fantasy (u Oblivion) tan enooooormes y laaaaargos...
Por otro lado, la historia principal me parece un poco simplona y falta de personajes carismáticos. Nunca llegas a poder sumergirte en la historia totalmente, porque andas haciendo otras cosas y además no es demasiado clara ni atractiva. Por poner un ejemplo, el malo malísimo es un puto chufla (sobre todo comparado con el de Fable, "Jack of Blades", que terminaba en forma de dragonaco gigante) y en el clímax final, en el enfrentamiento definitivo, resolví todo pegándole un trabucazo en la jeta. Uno solo. ¿Realista? Puede ser (sobre todo viendo el trabuco legendario en cuestión). ¿Épico? Nada de nada. Y la búsqueda de objetos realmente poderosos (como las ya mentadas armas legendarias) se me antoja facilona. Para conseguir la "Daichi", sin duda la mejor arma del juego, no hay que liar nada, solo avanzar lo suficiente en la trama y buscar un poco. Quizá esto también me ha decepcionado en parte por los recuerdos de todo lo que había que hacer en los FF para conseguir los objetos realmente pollúos (pollúo=muy bueno, muy poderoso). Por último, una cosa que también le resta duración al juego es que el dinero y la experiencia (lo necesario para mejorar y avanzar, vamos) son muy muy fáciles y rápidas de conseguir, si sabes cómo (y sin trucos). Si no lo sabes, el juego te durará mucho más.
En definitiva, puede parecer que el juego me haya resultado decepcionante en su conjunto, si bien no es para nada así. De hecho, diría que es un juego sobresaliente, casi imprescindible para los amantes de los juegos "de rol" (pongo comillas porque lo de juegos de rol aplicado a videojuegos es bastante relativo, y lo será siempre), y muy muy satisfactorio de jugar. Está muy trabajado y se nota que le han puesto amor a la criatura a la hora de crearla. Y además es que, admitámoslo, es precioso. Puedes quedarte un rato embobado en la plaza de Bowerstone mirando las casas, la gente, los puentes y quedar realmente fascinado, lo cual es extensible a cualquier parte del mundo. En resumen, un gran producto del que hubiera estado mucho más enamorado si no me hubiera hecho un mes antes la reliada postapocalíptica de Bethesda.
Ahora a por nuevos horizontes, esta vez galácticos. Este fin de semana empiezo con Mass Effect, e intuyo que ese no se me va a quedar pequeño....
Entradas
3 comentarios:
¡No me borreis los comentarios, mamongcetas! ¡Pa alguien que comenta!
muy buen review, aunque no haya jugado el juego xd
Publicar un comentario