Noticias del frente: El blog de Félix Sotomayor

BLOODY OMAHA

Todo el que me conoce algo, sabe de mi fascinación por la Segunda Guerra Mundial. Me encanta, pero no me malinterpretéis. No me gusta la violencia (ejem) y me declaro a todas luces pacifista. Sin embargo, la sangrienta campaña vivida en todo el mundo entre el año 39 y el 45 del pasado siglo tiene... algo tiene, que siempre atraerá poderosamente mi atención. ¿Es la situación global de la época? ¿Es la maquinaria de guerra existente por entonces? ¿O es simplemente la estética? Realmente no lo se, pero me ha gustado desde que era muy muy pequeño (¿Qué mierda es un F-22 Raptor al lado de las perfectas líneas curvas de un Spitfire?). El asunto es que por todo esto, también incluiría siempre en una hipótetica (e imposible) lista de mis películas favoritas algunas relacionadas con la confrontación mas bestia del siglo XX (al menos en lo que a cifras se refiere, porque como bestia bestia la Primera GM también tiene lo suyo, si no más). Sí, me flipan "Salvar al soldado Ryan", "Enemigo a las puertas" y la reciente pareja de filmes sobre la Batalla de Iwo Jima dirigida por C. Eastwood. Recordando en concreto la película de Spielberg, creo que nadie jamás olvidará la brutal escena inicial del desembarco de Normandía, que realmente ponía los pelos de punta. Esta escena precisamente es la que quiero que recordéis, y que en su rodaje se gastaron miles de dólares en efectos especiales y participaron centenares de extras.

Pues bien, para la serie de televisión TimeWatch (capítulo Bloody Omaha), la BBC encargó a tres diseñadores gráficos que crearan de la nada una recreación creíble del desembarco de Normandía. Lo gracioso del asunto es que sólo tenían cuatro días para hacerlo. Tres tíos, algo de atrezzo, cuatro días. ¿Imposible?

Mirad el resultado y juzgad: